Hoy presentamos una nueva sección dentro del blog dedicada a la actualidad de la lucha de clases en el Estado Español. Esta nuevo apartado de actualidad es un paso más en la mejora del blog para el cumplimiento de sus objetivos. El primer documento colgado se puede encontrar en la pestaña de actualidad o en el siguiente enlace:
Al mismo tiempo publicamos un artículo de análisis publicado en Sol Rojo, nº 41, en septiembre y que da una visión más amplia al documento de actualidad.
España
Hoy, cuando cada día que pasa se expresa más a nivel mundial la situación
revolucionaria en desarrollo desigual y que hemos entrado en la ofensiva
estratégica de la revolución proletaria mundial, el imperialismo español
profundiza su crisis dentro de la crisis general del imperialismo, que en
colusión y pugna entre las potencias imperialistas, corre hacia su tercera
guerra mundial, en medio de las luchas de las masas de todo el mundo.
En este
contexto, unido a la profunda crisis genera: moral, económica, política y
social del Estado español ha obligado a la burguesía monopolista española a
abordar las tareas de reimpulsar al imperialismo español, reestructurar el
viejo Estado y acabar con las luchas de las masas, o al menos que éstas se den
dentro del marco burgués.
En el
exterior, el imperialismo español está buscando su acomodo dentro del cambio
que supone el declive de la potencia hegemónica yanqui y la disputa de su
hegemonía por otras potencias imperialistas, principalmente el
socialimperialismo chino y el imperialismo ruso. En el interior, ante el avance
de las luchas de las masas, en número y radicalización, la pérdida de toda
legitimación de la actual forma de gobierno y la ruptura de los pactos tras la
muerte del fascista Franco entre la burguesía monopolista española, las
burguesías vasca y catalana y sectores de la aristocracia obrera, representados
por el PCE revisionista y los sindicato-mafias CC.OO. y UGT.
El Estado
español necesita de una nueva legitimación del Estado imperialista que logre la
cohesión social y unidad territorial necesarias para llevar adelante su
proyecto imperialista y, que de la misma forma que con la muerte de Franco, los
cambios sirvan para mantener el aparato del Estado imperialista intacto.
En febrero
de este año era presentado, como culminación de un trabajo de varios años, el
informe del “Real Instituto Elcano”, presidido por el ahora nuevo rey de
España, “Hacia una renovación estratégica de la política exterior española”.
Los objetivos de este informe son dar las directrices generales para “mantener
la cohesión interna”, “recuperar el apoyo ciudadano” y que el imperialismo español
avance “para convertirse en un polo de poder mundial”. Donde el proyecto
interno está estrechamente unido al proyecto exterior. El propio informe lo aclara
de forma explícita:
“Partiendo
de la premisa antes mencionada de que la acción exterior debe ayudar a lograr
los propósitos esenciales del modelo de país, este Informe ha identificado seis
objetivos estratégicos, conectados tres de ellos al cumplimiento del propio
proyecto interno (democracia, seguridad, y competitividad y talento), y otros
tres más bien a la política exterior (integración europea,
responsabilidad internacional e influencia).”
“El
segundo objetivo postula que España se defina y proyecte una identidad
internacional a partir del modelo de democracia avanzada al que aspiran los españoles.
Para ello, los poderes públicos necesitan asumir, y el conjunto de la sociedad
reclamar, una defensa más explícita de la democracia y los derechos
humanos
en el mundo. El corolario de esa actitud consiste en apoyar activamente la
generación de sistemas de gobernanza multilateral basados en la legitimidad compartida,
el respeto al derecho internacional y la eficacia. Pero el reforzamiento de la
relación entre política exterior y democracia no se traduce sólo en la
dirección que va desde dentro hacia fuera sino también, y quizá principalmente,
en saber aprovechar la potencialidad que tiene un determinado tipo de acción exterior
para mejorar la calidad democrática interior.
Por
un lado, eso significa colocar a los ciudadanos en el centro de atención,
empoderándoles frente a la globalización, promoviendo que participen más en
definir
cómo se conecta España con el mundo y, fuera de las fronteras,
proporcionándoles asistencia y protección.
Por
otro lado, asociarse nítidamente con otras democracias avanzadas con las que se
comparten valores cosmopolitas y asumir de forma más explícita la pluralidad territorial
en la proyección exterior puede ayudar a reforzar la identificación con el
proyecto de convivencia interna por parte de ciudadanos que ahora se sienten
alejados.”
Por un lado
la “democratización” de la sociedad, el “empoderamiento” de los ciudadanos”, a
lo “Podemos”, del que trataremos más adelante, y “asumir de forma más explícita
la pluralidad territorial” (federalismo) tienen un doble objetivo. Dar al
imperialismo español una fachada “democrática” y usar, como apunta el informe
del Instituto Elcano a “su considerable ‘poder blando’: riqueza cultural,
tolerancia y solidaridad de su sociedad” para aumentar su influencia en el
mundo como otros imperialismo que, como Suiza, Canadá o Noruega, entre otros, impulsan
el expolio de sus empresas a las riquezas de los pueblos del tercer mundo
presentándose, a través de sus organizaciones “humanitarias”, ONG’s,
fundaciones, etc., como actores importantes en la solución de problemas globales:
“procesos de paz”, problemas de “género”, cambio climático, etc.
El informe
apunta principalmente a Latinoamérica (especialmente a Brasil) y llama a la
colaboración con lo que se describe como “esfuerzo de los países
latinoamericanos para establecer entre ellos entidades de gobernanza colectiva
a diferentes escalas y con diferentes cometidos (CELAC, UNASUR, ALBA, MERCOSUR,
Alianza del Pacífico, etc.).” Resaltando el informe que “Está claro que la
actitud de las Cumbres Iberoamericanas (y la de España) sólo puede ser de
cooperación con esas entidades”.
Sobre otros
espacios de actuación exterior se aclara que dependiendo de los intereses del
imperialismo español, las actuaciones serán unilaterales o multilaterales, respecto
al socialimperialismo chino se obrará con planteamientos propios. Sobre la zona
Asia-Pacífico se dice: “Por otro lado, España debe tener planteamientos propios
y una relación singularizada con varios países de la zona, especialmente China”.
Los cambios
en la estrategia con Latinoamérica (el acercamiento a los “procesos
bolivarianos”, al “socialismo del siglo XXI”) y la independencia de su política
respecto a las relaciones con el socialimperialismo chino son importantes
cambios en la estrategia del imperialismo español que busca reimpulsarse en un
mundo que el informe califica de “multipolar”. El “Plan Estratégico”(2014-2017)
de la Cooperación Española también establece que: “la emergencia de nuevas
potencias está intensificando la necesidad de nuevas formas de gobernanza global.”
Pero no
todo es “poder blando”, ni tampoco lo principal, hoy el imperialismo español
mantiene misiones en la República Centroafricana, Mali, Somalia, Líbano,
Bosnia-Herzegovina, Afganistán, apuntando a una posible intervención en Guinea,
además de pertenecer a la OTAN. La base militar de Rota es el componente naval
del sistema antimisiles que junto al hegemonismo yanqui y otras potencias
imperialistas está implementando la OTAN en Europa contra el imperialismo ruso.
A esto hay que añadir que el pasado 16 de mayo la base militar de Bétera en
Valencia obtuvo la certificación de “mando de fuerzas conjuntas de la Alianza
Atlántica”, y que desde el 1 de julio la base se encuentra en alerta para
intervenir en cualquier lugar del mundo y situación que la OTAN considere de
“crisis” y que requiera el despliegue rápido de un cuartel general conjunto. En
la actualidad, no es noticia, que como miembro de la OTAN y de la CEE, el
imperialismo español ha sido promotor del golpe de Estado fascista en Ucrania y
que participa como potencia imperialista en la agresión imperialista a Ucrania.
A esto hay que sumar que la base de Morón es utilizadapor la superpotencia
hegemónica yanqui para sus operaciones en el norte de África. La cesión del uso
de la base es explicada por Pedro Morenés, Ministro de Defensa de la siguiente
forma: “La situación de inestabilidad en la región del Sahel y el Magreb es de
interés estadounidense”, y también es “una zona de especial sensibilidad
para la seguridad de España”.
Además el
imperialismo español mantiene acuerdos militares con 50 países,incluido el
Perú. Este acuerdo incluye la organización de una Unidad Militar de Emergencia,
actividades de entrenamiento y asesoramiento en la reorganización del ejército peruano.
Ahora bien,
sin la reestructuración del viejo Estado imperialista y la cohesión social
necesaria para impulsar su aventura exterior, esta nueva estrategia tiene los
pies de barro. La situación al interior es, como ya se ha dicho, de una
profunda crisis general: moral, económica, social y política. En datos del 2013
publicados por “Cáritas” la crisis económica se plasma en lo siguiente y la
realidad ha empeorado al día de hoy:
• En los
últimos cinco años, la renta media había caído un 4%, mientras que los precios
se habían incrementado en un 10%.
• Los
ingresos de las personas con rentas más bajas habían caído un 5% desde 2006.
• Tasa de
paro era superior al 26%, hoy el número de parados se aproxima a los seis
millones de personas.
• La tasa
de paro de la persona principal del hogar pasó del 6% al 21,4%.
• Existía
un 26,8% de personas en situación de pobreza y exclusión social.
• Cayó la
tasa de cobertura social, pues una de cada tres personas sin empleo no recibía prestaciones.
Desde una
las plataformas de afectados por las hipotecas (PAHs), se ha informado que en
2013 más de 50.000 familias perdieron sus viviendas. Los datos son
aterradores y la deslegitimación de la “democracia española”, de sus políticos,
de sus leyes, de la monarquía es abrumadora y hace poco tuvimos dos pruebas de
esto. Por un lado, las elecciones europeas donde la abstención ganó a los
votos y la coronación del nuevo monarca con una profunda muestra de desapego
e indiferencia por parte de las masas.
Esto unido
a las luchas de las masas, a su radicalidad (Can Vies, El Gamonal, el
levantamiento en La Cañada de Hidum, etc.), o las luchas masivas como las
manifestaciones de la Diada, año tras año, o los “15-M”, “Rodea al Congreso”,
entre otras, los “scratches” a políticos, las masivas movilizaciones en defensa
de la enseñanza pública, la sanidad, las luchas diarias contra los desahucios, los
despidos, etc. La aparición en los últimos años de un repunte de la guerrilla
urbana, etc. Hacen que para la clase dominante sea necesaria una
reestructuración del Estado imperialista español, incluyendo el cambio de las leyes,
usando tanto dulces caramelos como el miedo y la represión.
Esta
necesidad ha sido expresada públicamente por cuadros del Estado, forjados por
décadas, como María Ansón, que en declaraciones de este año, ha afirmado tanto la
necesidad de una reforma de la Constitución después de la coronación del nuevo
rey como la de un referéndum sobre el nuevo rey para que los votos legitimen su
reinado.
Es claro,
que tanto por necesidades exteriores como internas, estamos asistiendo a lo que
algunos llaman “segunda transición”. Que “democratice” las instituciones burguesas
para que la “democracia burguesa” aparente ser algo más que ir a las urnas cada
cuatro años para elegir a los verdugos de la clase obrera.
Aquí entra “Podemos”, tercera fuerza política tras las últimas elecciones
europeas. Su cabeza visible es incapaz de pronunciar la palabra “clase” cuando
va seguida de la palabra “obrera”. Pero al igual que el Informe de el Instituto
Elcano puede repetir sin trabarse y de forma fluida tanto la palabra
“empoderamiento”, como otras: “ciudadanía”, “trilateral”, “soberanía nacional”
y “casta”.
La misión
de “podemos” es contener las luchas de las masas, desmovilizarlas vía circo
electoral y desviarlas de la destrucción del viejo Estado. Llevar a cabo la
labor que el PCE revisionista ya hizo sólo con cierto éxito, pues la lucha
nunca cesó, en la legitimación de la actual democracia burguesa tras la muerte
del dictador fascista. Hoy el descrédito y el rechazo del PCE-IU por las masas
son tan altos que ya no puede cumplir con esta función. Por otra parte
“Podemos” no representa a la aristocracia obrera, es la expresión política de
sectores de la pequeña burguesía afectados por la crisis. “Construir la
democracia” es el eje del programa de “Podemos”, lejos del mundo de la
explotación capitalista y que se ajusta perfectamente ala estrategia presentada
en el Informe de Elcano sobre el“modelo de país” que pretende la burguesía
monopolista española.
Reimpulsar
el imperialismo español, reimpulsar a las grandes multinacionales españolas, no
sólo impulsaría a la mediana y pequeña empresa española, sino que para cumplir
este objetivo son necesarios los universitarios sin futuro para que a través de
ONG,s, fundaciones, etc., creen las
condiciones sociales y políticas necesarias para garantizar las inversiones de
las grandes multinacionales españolas en el exterior. Difundiendo una imagen de
“democracia avanzada””: empoderamiento, federalismo, plurinacionalidad, etc.
No parece
casual que el Banco Santander vaya a crear el programa “Paulo Freire” que será
el precursor de un nuevo Erasmus para estudiantes latinoamericanos y españoles.
En este
programa el banco financiará las primeras 5.000 plazas. La propuesta de unos
Erasmus latinoamericanos, según Rebeca Grynspan (ex Vicepresidenta de Costa
Rica y elegida Secretaria General Iberoamericana ), que hará la propuesta en la
cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará en agosto en
Veracruz(México), tendrán el siguiente objetivo: “estas becas(Erasmus) han
contribuido a la construcción de una identidad comunitaria”, experiencia
que se quiere repetir entre el Estado español y otros estados latinoamericanos,
además añade: “confío mucho en el Santander y espero contar con su apoyo”.
Todo es parte de la nueva estrategia del imperialismo español en Latinoamérica.
Y la
reestructuración está en marcha:
“Abdicación”
del rey, “abdicación” de Rubalcaba (Partido Socialista), “abdicación” de los
directores de tres periódicos de gran tirada (El País, El Mundo y La
Vanguardia).
“Podemos”,
levantado por gran burguesía: la “nueva” forma de hacer política, con una de
las campañas electorales más caras de la historia, con una permanente presencia
en televisión de horas y horas y días y días de la semana, hasta el
agotamiento. Principalmente en el canal “La Sexta”, en manos de un millonario
ultraderechista y el padrino de la cabeza visible de Podemos. Este millonario es
Lara, hijo de José Manuel Lara Hernandez (que pasó de capitán fascista de la
Legión a fundador del Grupo Planeta). Hoy, Lara hijo preside tanto el Grupo
Planeta, heredado de su padre, como el Grupo Atresmedia. Entre otras
ocupaciones también forma parte de los consejos de
administración
del Banco Sabadell Atlántico y del Grupo Zed.
En
definitiva, el Estado necesita tanto a su derecha como a su “izquierda” para
legitimarse, desmovilizar, contener a las masas y desviarlas de la lucha por el
socialismo y el comunismo.
En
Cataluña, el Conde de Godó (parte de la gran burguesía catalana, y miembro del
Comité Ejecutivo del banco “La Caixa” y presidente del Grupo Godó de
Comunicación, s.a.), dio la bienvenida al nuevo monarca e día de su coronación,
asegurando que “el Rey sabrá consolidar los puentes para el diálogo y la
negociación” entre España y Cataluña.
Como ante
la muerte del fascista Franco, se trata de apuntalar el Estado imperialista
cambiando las formas y sembrando ilusiones en la clase obrera y las masas,
manteniendo el viejo Estado. Si esto falla, y las masas siguen aumentando sus
luchas y su radicalidad, y así será, siempre quedará la constituyente y la
república burguesa para legitimar el Estado imperialista, y para que el
imperialismo español junto al revisionismo, viejo y nuevo, desvíen
hacia el
reformismo y la legitimación del Estado burgués las luchas de las masas que
luchan por la dictadura del proletariado y la conquista del poder mediante la
guerra popular dirigida por su Partido Comunista marxista-leninista-
maoísta
militarizado.
Si
“podemos” es parte del caramelo para desmovilizar a las masas, para las masas
que luchan (y siguen luchando) el Estado español ha aprobado lo que se conoce
como “ley mordaza” que tiene como objetivo desmovilizar a través del castigo y
del miedo. Hasta ahora el 70%, aproximadamente, de los procesados por
desórdenes públicos acaban absueltos. Ahora, con la nueva ley se pretende acabar
con la protesta social sumando la vía administrativa a la penal. Esto podría
parecer más garantista, pues por la vía administrativa no hay penas de prisión.
Pero la trampa está en que para entrar en prisión las penas tienen que ser
superiores a dos años o tener antecedentes, a la vez, la acusación tiene que
estar, en principio, bien fundamentada.
Con las
penas administrativas el testimonio del policía cobra gran peso, la instrucción
la realiza el Ministerio del Interior que se convierte en juez y parte y, por
tanto, acusar y condenar, es más sencillo para el Estado burgués.
Con la “ley
mordaza”, las sanciones van de 30.000 euros a 600.000 euros, llegando apenar
por una cuestión tan subjetiva como ¿“perturbar”?. Se prohíbe ir encapuchado a
una manifestación o concentración, se prohíbe desearle el mal a alguien por una
red social, por ejemplo alegrarse de la muerte de un político por facebook, se obliga
a ir permanentemente identificado, manifestarse delante del Congreso, etc. El
caso, es que todas las formas de protesta que se han generalizado en los
últimos años están penadas económicamente. Como la instrucción la realiza el
propio Ministerio del Interior la pena es segura.
La nueva
ley, por tanto, pretende atemorizar a las masas que luchan generalizando la
represión y llegando donde el código penal no llega. Ley que se aplicará a
todas las manifestaciones.
Esto no
implica que a partir de ahora todas las sanciones serán administrativas, el
continúo goteo de detenciones, con penas de cárcel algunas y otras con
detenciones que se alargan en el tiempo saltándose la propia legalidad
burguesa, son una muestra del salto represivo
del Estado
español. Son los casos de C. Cano, de Ana y Tamara, Isma y Miguel, Yago, Alfon
y tantos otros. No podemos dejar de mencionar la represión sin hablar de los presos
políticos que en duras condiciones se pudren en las cárceles del Estado
imperialista. Recordar que este año ha sido asesinada en las cárceles españolas
Isabel Aparicio, militante del PCE(r), o el testimonio de Mari José Baños
Andujar (GRAPO), que sobre su estado de salud explica: “es delicado, pues
necesito trasplante de hígado, que desde luego en estas casas no me van ni a
realizar ni a permitir.”
En toda la
prensa burguesa está apareciendo la palabra corrupción de forma generalizada.
Es cierto que los casos de corrupción son generalizados entre políticos de los partidos
(PSOE, PP, IU, CIU, etc.), los sindicatos (CC. OO y UGT), las organizaciones
patronales y la monarquía. Sin embargo la campaña de la prensa burguesa contra la
corrupción es parte de este intento de reestructurar el viejo Estado español.
Por un lado se quiere hacer creer que los seis millones de parados, la miseria,
la precariedad en el trabajo, etc. no son el efecto del capitalismo sino de los
corruptos o de la “casta”, que dice “podemos”, por tanto la solución es la
“regeneración” de la democracia y que la vieja “casta” sea sustituida por una
nueva casta compuesta por una joven generación de políticos puros como
“querubines” sin destruir el Estado imperialista. Por tanto, la campaña contra
la corrupción tiene como uno de sus objetivos la legitimación de la nueva
generación de profesionales de la política encabezados por un rey joven y
“moderno” frente a la vieja “casta”.
Por otra
parte, el capitalismo es corrupción, más todavía en su fase más parasitaria,
que la prensa burguesa esté ahora informando de casos de corrupción sólo tiene el
objeto de eliminar a aquellos que impiden esta reestructuración del Estado que
está en marcha, (ver el caso de la familia Pujol en Cataluña).
Sin duda
las tres tareas del imperialismo español están condenadas al fracaso, en el
exterior choca con la propia crisis general y última del imperialismo. Al
interior, por mucho “podemos” que haya, la crisis sigue golpeando de forma
salvaje a la clase obrera y esto no cambia renombrando la realidad, que es el
“programa” de estos neofoucaultianos, ésta sólo puede cambiar destruyendo elEstado
burgués y creando Nuevo Poder (nueva economía, nueva política, nueva cultura).
A los comunistas nos toca seguir trabajando por la reconstitución del Partido
en medio de la agudización de la lucha de clases y en medio de la guerra
imperialista. Con democracia o fascismo, con república burguesa o monarquía el
objetivo es el mismo, la destrucción del Estado burgués y la toma del poder para
la clase obrera. Nuestra tarea es sepultar toda ilusión reformista y caminar
rumbo al dorado comunismo con Partido, Ejército y Frente.
Ver más:
http://www.solrojo.org/SR41.pdf
http://mararmadodemasas.blogspot.fr/